... mas respuestas.. ó mas interrogantes.

La vida de los hombres, (y las mujeres tambien), empieza con el lenguaje, y nuestros primeros recuerdos se remontan a aquella época, a cuando aprendimos a hablar. Siendo en nuestras vidas el habla algo tan significativo, como ignorarlo, como no aprender a utilizarlo bien. pero ¿Cómo preguntar para obtener respuestas?.

No existe mas que la voluntad de poder, aun sobre el bien, el mal y los valores. Es una de mis frases preferidas y dice todo. El poder hacer las cosas esta primero que el querer hacerlas, aunque para uno se requiere forzozamente el otro, no siendo asi al revés. Que más puede querer alguien que le den el poder hacer las cosas, mas eso no significaria que las quiera hacer como ocurre con muchos de nuestros trabajos, entonces si me dan la voluntad de poder y querer, que más se puede pedir.

Volviendo a las palabras, bloques con que se construye el conocimiento, con ellas se desctiben imágenes, se crean sensaciones y estados de ánimo. Una pregunta que inicia con “si quisieras y pudieras..” elimina toda posibilidad de divagar y te centra en la realidad, en lo pragmático, y cierto, elimina la posibilidad de que haya restricciones sociales. Sin embargo, no es ventaja de quien pregunta primero y pregunta bien, dar ese margen de sesgo u oportunidad para, como dicen por ahí, escurrir el bulto o bien responer de manera clara, y no solo eso, si no de aclarar uno mismo sus deseos y pensar en cosas que desde mucho tiempo atras le impidieron hacer y pensar por una u otra razón.

En la pregunta: ¿Amarías a las tres?, es por mucho más ambigua que el “si quisieras y pudieras”, la respuesta de diccionario sería: si te amas a ti mismo, amas a quien sea. Obvio que no sería la misma clase de amor, pues para cada humano que camina en el mundo, hay un tipo de amor.