El segundo día...


El segundo día trató de distraerse, de no pensar. Volvió a perder en la batalla de la conversación. Recuperó alguna de sus cosas, y las puertas se fueron cerrando tras sus pasos una a una y se hizo oscuridad.
-Hasta siempre- fue la respuesta burlona que musitó mientras se alejaba, atrás quedaba esa voz femenina diciendo, no empieces otra vez por favor.